Lola Kirke aprovechó la noche de los Golden Globes para mandar algunos mensajes políticos a través de su atuendo: más allá del hermoso vestido en tonos pastel, los elementos clave fueron un pin con la leyenda "Fuck Paul Ryan" (tres días después de que Ryan anunciara los planes para dejar de financiar a Planned Parenthood) y las axilas sin depilar.
La actriz de Mozart in the Jungle llegó a la alfombra roja con las axilas peludas, lo cual NO debería ser motivo de escándalo. Sin embargo, en un mundo en el que a estas alturas del siglo XXI se pretende seguir controlando los cuerpos de las mujeres (desde el vello corporal hasta nuestras decisiones reproductivas), el que Lola Kirke pose ante las cámaras sin intenciones de ocultar su no-depilación es toda una declaración.
"Gracias a la gente hermosa que NO me envió amenazas de muerte por mis hermosas y peludas axilas", escribió la actriz en Instagram, lo cual nos hace pensar que sí recibió amenazas de muerte por hacer lo que se le da la gana con el vello que le crece debajo de las axilas. Al final, Lola se tomó una foto con Iggy Pop, lo cual eclipsa cualquier cosa negativa que pueda decirse sobre ella:
"La mejor cita de todas".
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