Apenas cumplí 29 y ya estaba muy preocupada por los 30; estúpidamente estresada por mil cosas que habrían de suceder en el minuto uno de mi trigésimo cumpleaños.
Pero cumplí treinta años y no ha pasado nada. Bueno, en realidad ha pasado muchísimo, pero nada de todo eso que temía, así que en realidad, los 30 me han decepcionado.
A continuación les doy treinta pruebas de lo decepcionantes que son los treinta:
1. No me volví loca
Los treinta son una edad con muchas expectativas, pero no sucumbí ante todas ellas y no me volví en automático en una loca. (Gracias, terapia, por existir.)
2. No me han dado ganas de usar tacones para el trabajo
Uno piensa que llegar a esta edad significa un montón de cambios, como dejar de querer usar tenis diaro, pero no.
3. No me sofistiqué
Pensaba que en automático me gustaría el vino, me compraría camisas y automáticamente despertaría siendo una dama.
4. No perdí las ganas de fiestear
No sé por qué, pero pensé que al cumplir treinta de pronto me pondría súper seria. No fue así. Hasta parezco 'jovencita'. Al menos ya no tomó cochinadas, como ron blanco.
5. No dejé de ir a conciertos
A veces uno piensa que ciertas cosas ya no van con la edad, pero no he dejado de disfrutar ir a festivales de música. Es más ahora, hasta me va mejor en ellos, creo.
6. Me convertí en una 'señora' y me encanta
Y a mucha honra, porque es hermoso comenzar a preocuparte por cosas pequeñitas, como tu casa, planchar tu ropa con electrodomésticos perrones, cuidar tu carita toda hermosa, saber elegir frutas y verduras...
7. Mi vida no tomó sentido de pronto
Esto sí pésimo servicio de los 30. Pensé que venían con sentido de la vida incluido, pero al parecer, eso se va conformando y cambiando con el tiempo.
8. Ni se resolvió al llegar a esta edad
¡¿Cómo que cumplir 30 no viene con el trabajo perfecto y sin deudas ni problemas emocionales?!
9. Tampoco me convertí en un adulto hecho y derecho
Lo que sea que significa ser un adulto, todavía no me siento como uno por completo.
10. No soy millonaria
Spoiler: La estabilidad económica no llega cuando llegas al tercer piso.
11. Ligar no se volvió más fácil
Uno pensaría que para los 30 la gente se deja de rodeos y se dice las cosas derecho, pero no, puedes tener mil crushes a esta edad también, a los que quizá nunca les digas que los amas.
12. Los 30 no son los nuevos 20
De hecho, son una versión mejorada y con más dinero.
13. Tengo más responsabilidades
Pero, pues, esa independencia no se va a pagar sola.
14. Aún no logro hacer comida solo para mí
¿Hasta qué edad llega el súperpoder de cocinar con las cantidades exactas para solo una persona?
15. Me preocupo más por todo y por todos
¿Es esto abrir los ojos y estar más consciente de la vida?
16. Agradezco por todo
Ahora todo me parece una bendición, tanto lo que llega como lo que se va, lo negativo como lo positivo.
17. Perder el tiempo perdió la gracia
Ni con personas, ni con cosas que no valen la pena, ya no hay tolerancia para perder el tiempo con lo que no deja nada en la vida, ni para pasar el rato.
18. Cuido más a mis plantas que a mi estómago
Aunque creo que estoy a una gastritis/colitis nerviosa de que ya no sea así.
19. No tuve un hijo
Se acuerdan que como a los 8 piensas que cualquier persona de 30 ya tiene hijos, pues no sucede así.
20. Tampoco me casé
No es queja y aún tengo la esperanza de que suceda.
21. Pero tampoco me molesta pensar en que no sucederá
Para los 30, ya sabes que la vida se trata de muchas cosas más que lo que la tradición dicta, así que si no me caso, tampoco será el fin del mundo.
22. El tiempo familiar se volvió muy preciado
Si uno antes odiaba tener que aguantar a la familia, ahora se amplió: amigos, cuñados, ¡una sobrina! Y verlos es hermoso.
23. La relación con mis padres no empeoró
De hecho, incluso creo que mejoró mucho y ya casi me ven como un adulto por completo, a pesar del punto 9.
24. Tampoco la relación con mi cuerpo
Aunque también llegaron cambios para él, con la nueva consciencia que traen los 30 lo aprecio más cada día. Y lo amo.
25. Las relaciones amorosas no se vuelven más fáciles
!¿Cómo que los hombres no maduran a los 30?! JLo tenía razón.
26. No dejé de cometer errores
Y entonces te desas haberte muerto de chiquita como tres veces al día, pero ni modo, así es esto de VIVIR en general.
27. Aún quieres perrear
El gusto por el reguetón no se va así nomás.
28. No comencé a quitarme años
De hecho, estoy súper orgullosa de haber sobrevivido a los veintes de manera tan honorable.
29. Terminé con quien pensé que me casaría
Es una gran decepción que tu amor de los 20 no te acompañe en la siguiente década, pero es bonito saber que no estás forzando una relación y que ambos estarán bien.
30. No pasó nada catastrófico
A pesar de la crisis, nada cambió radicalmente después de mi cumpleaños, no dejé de ser yo y la vida sigue estando bien, con sus altibajos, pero como diría J Balvin, "ahí vamo'".
En resumen, los 30 son un tanto decepcionantes, porque todas esas expectativas sobre la edad son solo eso, expectativas que no tienes por qué cumplir, ni que llegan en automático solo porque ya llevas 30 años respirando.
También son una decepción porque en lugar de ser esa terrible edad que esperas, en realidad son un gran momento.
via ActitudFem - Una comunidad versátil, para la mujer contemporánea http://bit.ly/2RrAMep
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