Si ésta no es una historia de amor, seguro sí es una de fraternidad o humanidad que comenzó con la cuarentena.
El periodista Ibon Pérez tuiteó en días reciente la historia de sus vecinos.
Un chico y una chica que viven en edificios distintos y que, a cierta hora del día, han comenzado a compartir un rato juntos, cada uno desde su ventana.
"Cada tarde, tras los aplausos sanitarios, este chico que vive en el edificio de enfrente sale a la ventana con la flauta travesera.
Su única espectadora,una chica. Hablan entre canción y canción.Parece que él toca para ella y,la verdad es que desde que ella se asoma él toca mejor", relató.
Cada tarde,tras los aplausos sanitarios,este chico que vive en el edificio de entrente sale a la ventana con la flauta travesera. Su única espectadora,una chica.Hablan entre canción y canción.Parece que él toca para ella y,la verdad es que desde que ella se asoma él toca mejor. pic.twitter.com/v5OHunX2z5
— Ibon Perez (@ibonpereztv) April 7, 2020
Esta historia ocurre en Madrid, donde están en cuarentena desde el 14 de marzo y concluirían, si todo va bien, el 13 de abril.
Lo último que Ibon ha contado sobre estos vecinos es que él promete tocar una última, pero siempre toca una más para la chica.
Siempre le dice "bueno, y esta es la última canción por hoy", pero siempre toca una canción extra de más. Y ella ríe divertida. Aplaude y cuando el chico, por fin, deja de tocar su instrumento ni cierra la ventana ni se mete en casa. Y así hasta el día siguiente pic.twitter.com/lGacSppPZB
— Ibon Perez (@ibonpereztv) April 7, 2020
La forma de relacionarnos ha cambiado muchísimo desde que comenzó la pandemia.
En algunos casos para peor, como lo revelan las denuncias en aumento por violencia doméstica, pero en otros casos también hay anécdotas que llenan de ilusión.
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