Es increíble lo rápido que pasa el tiempo y así, en un abrir y cerrar de ojos, Justin Bieber ya tiene 25 años.
Su carrera comenzó cuando él tenía 15 años, así que llevamos 10 años viéndolo subir a la fama, escuchando los cambios en su voz, siguiendo sus metidas de pata y, por supuesto, sus amoríos.
La verdad es que en los últimos años se ha redimido aunque sea un poquito, como ya te habíamos mostrado acá que dejó de ser un cretino.
Para sus 25, ya es un hombre casado (aunque creemos que lo hizo para tener sexo con Hailey) y que lucha con la depresión que le ha provocado tener una vida de famoso a tan pronto.
La de Justin Bieber bien podría ser una historia similar a la de Luis Miguel: ambos son dueños de un gran talento y crecido con responsabilidades (y beneficios) adelantados a su edad.
De ser un nene cuyo sello característico era traer el pelo en la cara, a un joven con el torso completamente tatuado, Justin seguirá dándonos de qué hablar, porque es un humano como todos nosotros, excepto que de él sí nos enteramos siempre que la c*ga.
En la galería de arriba te contamos más sobre su evolución y como dato curioso del cual nos dimos cuenta armando esta galería, el cantante aún tiene fotos con Selena Gómez (aunque el romance terminó definitivamente el año pasado, pero esperemos que lo de Selena y Zac Efrón prospere) en su Instagram.
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