Estar enamorado puede ser una de las mejores cosas que pasan en la vida... pero en algunos casos puede ser la peor. Si es un amor imposible o la relación ha acabado puede ser muy difícil e incluso doloroso. ¿Se puede dejar de estar enamorado?
Las razones para no querer estar enamorado pueden ser múltiples: si no eres correspondido, si uno de los dos decide acabar con la relación, si estás en una relación y empiezas a sentir algo por otra persona...
Pensar todo el tiempo en la persona equivocada, soñar con ella y no poder sacarla de nuestra cabeza puede convertirse en una dolorosa obsesión que sólo nos lleva a desear "desenamorarnos".
Pero, ¿cómo dejar de estar enamorada?
1) Antes que nada es necesario que te des cuenta de que el enamoramiento es un estado físico, que tiene que ver con procesos en nuestro cuerpo.
2) Para dejar de pensar en esa persona, puede ser sano alejarte de ella. Puedes empezar en el plano virtual, es completamente válido que borres a esa persona, pero si no lo deseas, opta por silenciar las notificaciones, sé fuerte y evita estar al pendiente de lo que hace.
3) Busca otras ocupaciones: sal con amigos, haz ejercicio, ve al cine, lee un libro. Si tu mente y tu cuerpo están ocupados, notarás que paulatinamente dejas de pensar en esa otra persona y muy pronto te darás cuenta que ya no estás enamorada.
4) Llena los lugares que visitaron con nuevos recuerdos. Si acudían a algún lugar con frecuencia tienes dos opciones: dejar de visitarlo o visitarlo con otras personas y crear nuevas experiencias en ese lugar. ¡No tienes que dejar de ir a tu lugar favorito!
5) Evita aislarte de otras personas. Cuando atravesamos por una ruptura o queremos dejar de estar enamorados, es posible que queramos estar solos y vivir nuestro proceso de "duelo". Sin embargo, también es sano que nos obliguemos un poco a salir con nuestros amigos y a rodearnos de otras personas, nos distraerán y nos recordarán que no estamos solos.
6) Recuerda lo valiosa que eres y busca cosas que te hagan feliz. Suena muy obvio, pero muchas veces nos sentimos tan mal que se nos olvida cuidar de nosotros mismos.
Publicar un comentario