Toda la vida hemos escuchado cosas como: "los hombres sólo quieren una cosa" o "ellos siempre tienen ganas".
Sin embargo, en realidad nosotras también queremos disfrutar de nuestro cuerpo y de nuestra sexualidad. Y no sólo eso... hay momentos en los que nosotras tenemos ganas y ellos no.
En principio tendríamos que hablar de lo natural que es eso: no significa que ya no les gustamos o que están saliendo con alguien más.
En realidad sólo significa que por el momento no están de humor, están cansados o simplemente no quieren.
Sin embargo, hemos visto siempre películas, series y otros productos culturales que nos bombardean diciéndonos que somos nosotras las que a veces no queremos, a las que "les duele la cabeza".
Por eso es importante hablar de cuando nosotras sí tenemos ganas y ellos no, ¿qué debemos hacer?, ¿algo está fallando en nuestra relación?
¿Cómo solucionarlo?
En primer lugar habría que analizar si es una situación recurrente, y si ya llevamos mucho tiempo sin tener relaciones con nuestra pareja.
Después, es necesario hablarlo para exponer el problema. Decir que para nosotras también es importante esa otra faceta de nuestra relación y preguntar qué está fallando.
Este problema es más común en parejas que llevan mucho tiempo juntas, pues la relación comienza a volverse monótona, y ya no probamos cosas distintas. Hablar con nuestra pareja nos dará luz para saber si podemos probar cosas nuevas, jugar con personajes, situaciones, lugares o lencería que pueda ayudarnos a reactivar esa parte.
Otro componente puede ser el uso de juguetes. Esto no sólo sirve en la interacción con la pareja, sino que también nos ayudará a satisfacer nuestro propio placer. Acá te contábamos del Satisfyer Pro.
Buscar ayuda profesional
La sexualidad es una parte importante de la vida en pareja. Sin embargo, no es igual en todas las parejas.
Hay algunos que se acostumbran a esa falta de sexo, y pueden vivir con eso. Pero cuando uno de los dos no se siente bien sin esta faceta, puede ser necesario también hablar con un especialista si no se puede solucionar dentro de la pareja.
La idea es reactivar esa parte y también revisar cómo puede subsanarse, ver qué necesitan los dos para sentirse satisfechos sexualmente.
Aunque lo más importante es reconocer que es un problema muy común, y que les sucede a muchas parejas, pero estamos acostumbradas a que en el imaginario de todas somos las mujeres quienes no tenemos ganas y las que nos aburrimos después de un tiempo... y muchas veces es todo lo contrario.
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