Las cirugías plásticas son un tema que siempre da de qué hablar y algunas veces incluso se convierten en la razón de separación de algunas parejas, como el caso de esta mujer que se divorció ante presiones para operarse.
A través del portal ‘Love What Matters’ la joven contó su triste experiencia con el objetivo de mostrarle a más mujeres que “nunca tienen que cambiar por un hombre” y no podemos más que aplaudirle a ella por su valentía y ejemplo.
Ella se divorció ante presiones para operarse y compartió su historia con el mundo
Muchas somos las mujeres que hemos pasado por la inseguridad en el autoestima derivada de las imágenes, publicidad y representaciones en el cine y la televisión que nos muestran a mujeres aparentemente perfectas y estándares de belleza imposibles de alcanzar.
Aunque cada vez son más los mensajes que buscan transmitir lecciones de amor propio, la verdad es que la industria de la ‘belleza’ es una tan grande como poderosa y es por ello que las cirugías estéticas continúan siendo tan populares como siempre.
Pero si bien muchas mujeres lo hacen por decisión propia, hay parejas que se creen con el derecho de ‘sugerirle’ y hasta presionar a su pareja a que se realice una cirugía, como esta mujer que se divorció ante presiones para operarse.
Y es que lo que nadie se espera de una relación con alguien que ama es que esa persona tan especial para nosotros no pueda ver lo que hay —en todo sentido— y prefiera notar todo aquello que para nosotras son inseguridades para intentar cambiarnos, ya sea físicamente o en cualquier otro aspecto.
Según cuenta la joven, ella nunca se vio como una persona ‘fea’, pero tampoco se sentía particularmente bonita y durante la preparatoria comenzó incluso a notar diferencias entre su aspecto y el de algunas de sus compañeras, las cuales resultaban en comentarios sumamente dañinos de parte de sus compañeros.
Con mucho trabajo, ella superó estos momentos y fortaleció su autoestima a lo largo de los años y cuando su entonces novio le decía que era muy bonita y hermosa, ella aceptaba sus cumplidos con agradecimiento.
Después de un año de relación, la pareja se mudó junta y para ese momento ya sabía de su consumo de contenido adulto y de su atracción por celebridades como las hermanas Kardashian, pero para ella eso no significaba nada… ‘hasta que comenzaron los comentarios’ dice.
'Cariño, ¿crees que alguna vez te operarías?' o 'Tu cara se vería tan linda si tus labios fueran un poco más llenos. Mira, como los de ella’, eran algunos de ellos y ella los tomó como bromas, por lo que no les dio más importancia y aceptó casarse con él.
Pero el tema volvió a surgir y aunque ella ya le había dicho que no consideraría aumentarse los senos o cualquier otro tipo de cirugía estética, su esposo nuevamente lo sugirió, por lo que ella se divorció ante presiones para operarse.
Su paciencia acabó cuando en su cumpleaños número 27, su esposo la llevó a un armario en su departamento y le entregó un sobre que contenía cientos de dólares, ante su expresión de sorpresa, él solo le explicó que era todo el dinero que había ahorrado para que pudiera operarse.
Fue en ese momento cuando ella supo que su relación no podía continuar, pero por si todavía quedaba una duda, el día que ella se salió del departamento, su ex-pareja todavía se atrevió a decirle: ‘Tal vez sea suficiente con relleno en tus labios. No te vayas’.
Por supuesto que el proceso de divorcio fue doloroso, pero ella logró salir adelante, ahora se ama más que nunca y les envía un mensaje a todas las mujeres con su historia:
‘Señoras, nunca alteren quirúrgicamente su apariencia por el afecto de un hombre. ¡Eres hermosa como eres! Y si decides operarte, también está bien. Solo asegúrate de que sea TU decisión’.
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