En México el Día del Niño, se celebra el 30 de abril y probablemente, tú que nos lees y ya no eres una niña, recuerdes cómo cuando ibas a la escuela regresabas a casa con bolsas y bolsas de dulces, donde te esperaban con tu platillo favorito y tal vez con un juguete que deseabas. Es una fecha que la mayoría de nosotros recordamos con mucha felicidad, sin embargo, el origen de este día no es muy feliz que digamos…
Comencemos por recordar que antes, (del siglo XVIII a inicios del siglo XXI) a los niños en México, ninguna ley los protegía. Eran considerados como una ‘propiedad de sus padres’ y por esa razón, era muy común que fueran ‘vendidos’ para trabajar en casas acaudaladas. Tampoco tenían derecho a un trato digno, e incluso no se les consideraba seres vulnerables que necesitaban de atenciones o cuidados especiales.
Sólo los menores que provenían de las clases acomodadas de la entonces Nueva España, podían estudiar y disfrutar de su niñez, los demás tenían que trabajar para ayudar con la economía del hogar, sin importar la edad que tuvieran.
Al otro lado del mundo, las cosas no eran muy diferentes. Miles de niños eran tratados como adultos y nadie se había detenido a pensar en sus necesidades de acuerdo a su edad.
Fue hasta después de la Primera Guerra Mundial, donde murieron aproximadamente 31 millones de personas, entre ellos una cantidad innumerable de menores, que algunos activistas en el mundo, una de ellas Eglantyne Jeeb, fundadora de la organización Save The Children, comenzaron a pensar sobre los efectos negativos de los conflictos bélicos en la sociedad y en especial en los niños.
Ella, con ayuda del Comité Internacional de la Cruz Roja impulsaron la primera Declaración de los Derechos de los Niños.
Así, en 1924, durante la Convención de Ginebra se emitió la Declaración de los Derechos de los Niños. El primer documento internacional que reconocía a los infantes y a las responsabilidades de los adultos con ellos.
Día del Niño en México
A raíz de la Convención de Ginebra, el interés por atender las necesidades de la niñez hizo eco en varios países del mundo, incluyendo México.
El presidente, Álvaro Obregón sumó a nuestro país al acuerdo el 30 de abril de 1924 y estableció ese día para celebrar oficialmente el Día del Niño.
En el mundo:
Durante el holocausto ocurrido durante la Segunda Guerra Mundial, los derechos de los niños fueron vulnerados y se creó la Organización de las Naciones Unidas, organismo que fundó la UNICEF para asegurarse que los menores nunca más tuvieran que sufrir por conflictos bélicos o por la irresponsabilidad de los adultos.
Por ello, el 20 de noviembre de 1959, la Organización de las Naciones Unidas aprobó una nueva Declaración de los Derechos del Niño, con más principios para su cuidado, que los propuestos en 1924, de manera que se estableció que el 20 de noviembre, como el Día Universal de Día del Niño y sugirió que cada país, tuviera su propio día para festejar a los pequeños. En México, se decidió celebrar el 30 de abril, pues el 20 de mayo chocaba con la celebración de la Revolución Mexicana.
En este Día del Niño, no olvidemos su origen, demos amor y ayudemos a los pequeños que lo necesiten. Tu niño interior te lo agradecerá.
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