Nadie puede negar la nostalgia que provoca la década de los 90, no solo porque nos recuerda nuestra infancia-adolescencia, sino porque tampoco podemos refutar que de ella salieron muchos de nuestros ídolos.
Selena Quintanilla es uno de los favoritos. Hoy, 16 de abril, el día en el que la cantante celebraría 47 años, uno no puede evitar escuchar a todo volumen sus canciones y entonces pensar en cómo es aún un ícono para los millennials, incluso tantos años después de su muerte.
1. Sus canciones, OBVIO
Selena no solo hablaba de amor, en esa manera romántica común, también tenía canciones divertidas, como “El chico del apartamento 512” o “La carcacha”, cuyas letras eran tan reales que por eso es fácil identificarse con ella.
2. Sus curvas
El cuerpo de Selena no era aquel delgado de los estándares y ella no temió usar la ropa de moda, como bustiers, influenciada por Madonna, y convertirse ella misma en una mujer que con su seguridad, rompió muchos estereotipos.
3. Su personalidad
Esa sonrisota que le explotaba en la cara es una de las más sinceras que vimos cuando éramos más pequeños. Verla en entrevistas, tan sencilla y siempre tan carismática nos marcó.
Además, ¿a qué otro artista han visto que pueda parar una tragedia con su simple y hermosa voz? Selena lo daba todo en el escenario.
4. La rompió en un género de “hombres”
En sus inicios, por ahí de los ochenta, Selena fue criticada por cantar música tejana, un género dominado por los hombres, pero para 1987, ella ya había logrado ganar el Tejano Music Awards a la mejor vocalista femenina, probando que ya no hay lugar para géneros “solo de hombres”.
5. Sus raíces mexicanas
A pesar de que su nacionalidad por nacimiento era la estadounidense, Selena nunca olvidó sus raíces mexicanas y logró mezclarlas en su música, para crear su ritmo único, el tex-mex.
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